Habitación doble |
Estamos trabajando en ello todo lo que podemos y lentamente le damos nuevos aires y nuevas sensaciones.
Mientras seguimos preparando otras habitaciones para transformar, hemos acondicionado en gran parte la primera, reciclando el espacio, cambiándole el color, reorganizando el interior para conseguir esa sensación buscada al momento de pensar en la comodidad de todo aquel que habite ese lugar, aunque sea por un fin de semana.
Lo vamos consiguiendo, vamos iluminando la casa de Luz de Pueblo, rincón por rincón, creando el clima que nos hace sentir cómodos, dentro y fuera de la casa.
Cada fin de semana que pasamos en Iriarte es una experiencia de calma, de alegría y satisfacción por estar siguiendo nuestro sueño y también por tener la posibilidad de disfrutar del tiempo, da la pausa, de la charla con los vecinos, de la sombra de los árboles, del cielo o del cantos de los pájaros.
Hacer lo que creemos mejor para nuestras vidas y hacerlo con nuestras propias manos es una hermosa sensación, ya que de ello brota el amor, la dedicación y toda la ilusión en el trabajo.
Sentimos que estamos creando un punto en el planeta en el que podamos aportar lo mejor de nosotros a nuestros visitantes, compartir bienestar y desarrollar nuestros potenciales humanos, interactuando desde un lugar que estamos viendo nacer y que cuidaremos especialmente para ello.
Vamos haciendo camino al andar, vamos desarrollando Luz de Pueblo.
Rocío y Pablo